Una historia de innovación a través de 4 generaciones
En Bodegas Piqueras llevamos desde 1915 trabajando en familia para conseguir la máxima calidad respetando la tierra y cuidando al máximo nuestro mayor tesoro: la D.O. Almansa.
UNA VOZ PROPIA
Crecer no significa perder de vista cada detalle de la producción y avanzar no supone olvidar la tradición.
Nos tomamos muy en serio la calidad en todo el proceso de elaboración del vino, controlando cada parte del mismo: desde el cuidado de la tierra y el tratamiento de la uva, hasta el embotellado y servicio al cliente. Y seguimos haciéndolo muy de cerca, como cuando se fundó nuestra bodega en 1915.
Un buen vino nace del amor por la tierra y el cuidado del campo, por eso seleccionamos minuciosamente las plantas, la gestión de la poda y la sanidad y control de las viñas.
Sentir el vino e innovar
para mejorar
La maquinaria de Bodegas Piqueras es totalmente puntera, optimizando así el proceso de recogida, prensado, filtrado, embotellado y etiquetado.
Pero para conseguir los mejores vinos se necesita escuchar los viñedos, sentir su evolución; estar presentes en cuerpo y mente para encontrar el momento óptimo de recogida de la uva. Y así conseguir el coupage perfecto para cada añada.
El espíritu de nuestros fundadores sigue presente así como su visión innovadora del mundo del vino, que seguimos ampliando y mejorando con nuevas técnicas, procesos y tipos de vino.
LA HISTORIA DEL ABUELO PIQUERAS
Todo empezó con él, el abuelo Luis Piqueras López, que vendía el vino que elaboraba en una pequeña aldea de “Los Aljibes” en el año 1915. Y sigue con toda una historia de 4 generaciones dedicadas a la producción vitivinícola bajo la D.O. Almansa.
Una denominación de origen que se caracteriza por terrenos de fertilidad baja y escasa precipitación que, unidas al clima continental semiárido, nos permite obtener vinos de alta concentración de color y gran riqueza aromática.
Una historia de tradición e innovación que nos ha llevado a elaborar vinos que se exportan a más de 45 países.
Las variedades Garnacha Tintorera y Monastrell son las uvas autóctonas que utilizamos en casi todos nuestros vinos.
Controlamos todo el proceso de elaboración desde la elección de la planta hasta el diseño de las etiquetas, lo que nos permite ofrecer una gran calidad asegurada.
Nuestros vinos son el reflejo de la esencia de nuestra tierra y su gente, con un carácter y voz propios, elegantes y expresivos.
El Abuelo Luis Piqueras López empieza a elaborar y vender su propio vino a granel en una pequeña bodega de la aldea de “Los Aljibes” a 10 km. de Almansa.
Abrimos dos despachos en Almansa ubicados en las calles San Antonio y Méndez Núñez. Allí se realiza la venta directa del vino de Piqueras.
Un golpe de suerte hace ganar la lotería al Abuelo Luis Piqueras: 8 pesetas jugadas que permitieron comprar un solar en la calle Campanario, donde se construyó la nueva bodega en Almansa.
Luisa, la hija pequeña, se casa con Mario Bonete García, que empieza a estudiar enología para incorporarse a la Bodega.
Nace Ángel Bonete Piqueras, nueva generación de la familia de bodegueros, y se embotellan manualmente las primeras 100 botellas de vino para celebrarlo.
Nace Juan Pablo Bonete Piqueras, actual CEO de la bodega. Con él llega el embotellado industrial.
Uno de los vinos míticos de la bodega sale por primera vez al mercado: el Castillo de Almansa.
Se amplían las instalaciones de Bodegas Piqueras construyendo la primera Sala de Barricas para la crianza del vino.
Mario Bonete, ya como enólogo diplomado, gana el Concurso Nacional de Catadores de Vino.
Fallece Mario Bonete, y Juan Pablo y Ángel toman definitivamente el mando de Bodegas Piqueras.
Comienza el proyecto de producción ecológica con la compra de la Finca “Los Timonares” y sus más de 100 hectáreas de viñedo propio.
Inauguración de la nueva bodega de 7000 m2 con capacidad para elaborar 3.000.000 de litros de vino, planta propia de embotellado, sala de crianza para 3500 barricas y tienda.
Pablo y Javier, 4ª generación de la familia Piqueras, se incorporan a la bodega.
Bodegas Piqueras celebra sus 100 años de historia.
Se compra la Finca “El Vínculo” con 300 hectáreas. Allí se cultiva, además de viñedo ecológico, olivos, almendros, nogales y cereal.
Se incorpora Miguel Bonete como la otra parte de la 4º generación.
